Las crisis económicas globales han demostrado en las últimas décadas que las fuerzas de mercado no pueden regularse por sí mismas, sin instituciones fuertes que velen por los intereses de quienes tienen menos influencia en las decisiones y que los efectos de los desajustes en las economías nacionales pueden expandirse como regueros de pólvora de un extremo al otro del planeta.
Las guerras tampoco afectan sólo a los países beligerantes, sino que tiñen y lesionan el conjunto de las relaciones internacionales. El calentamiento global, es evidente, afecta a todos los habitantes del mundo, sin importar qué países sean los que aportan más decididamente a la contaminación ambiental.
El tráfico de armas, de drogas y de personas se alimenta vorazmente de la porosidad de las fronteras para operar sin límites en todo el globo. Si una conclusión surge de este entramado global cada vez más complejo es que ninguno de estos retos puede ser abordado únicamente fronteras adentro de un país ni tratado apenas en un grupo exclusivo y pequeño de líderes mundiales.
En efecto, desde hace tiempo asistimos a un reordenamiento mundial en el que los liderazgos, sea en el terreno político, económico o militar, rompen con los esquemas históricos.
El avance de los países asiáticos y de las economías emergentes en detrimento de las potencias occidentales obliga a abandonar las actitudes aislacionistas para ampliar el grupo de los que definen las políticas sociales, económicas y ambientales que involucran y afectan a todo el planeta.
Henry Kissinger asegura en su último libro, no casualmente llamado Orden mundial, que el mundo enfrenta una paradoja: su prosperidad depende de la globalización y, sin embargo, el caos amenaza ese fenómeno. En un mundo incierto, es indudable que las decisiones son cada día de mayor complejidad.
Por eso, afirma, un orden mundial de Estados que “afirmen la dignidad individual y el gobierno participativo, y cooperan internacionalmente de acuerdo con reglas consensuadas, puede ser nuestra esperanza y debería ser nuestra inspiración”.